Tendencias en la evaluación de las competencias: uso de las TIC

Vamos a analizar una ponencia publicada en Las Jornadas Internacionales en Red Temática de Docencia.Universidad Nacional de Río Cuarto, 2010, por Juan José Monedero (Universidad de Málaga, 2011), titulada: ''Tendencias en la evaluación de las competencias: uso de las TIC''.
La educación está avanzando con la aparición de las nuevas tecnologías y cada vez son más los países que se suman a adoptar políticas educativas que incorporan competencias tecnológicas en su currículum. No obstante, hay bastantes personas que rechazan lo nuevo y lo innovador y no aceptan que las nuevas tecnologías deban implantarse en las aulas. En este trabajo se indagará sobre el origen de las competencias y qué importancia tienen en la actualidad, además de los instrumentos que existen para su evaluación.
Se profundiza sobre las herramientas TIC que se aplican para evaluar competencias; se analizan las principales técnicas e instrumentos de recogida de datos y de evidencias.
Como por ejemplo la observación. Su uso focalizado es básico en el proceso de evaluación, no solamente para valorar los comportamientos y las actitudes del alumnado, sino también para ser utilizada como instrumento de evaluación y de reflexión más global. La finalidad de su uso debería tener como objetivo la mejora, tanto del proceso de enseñanza y aprendizaje en general que incluye el análisis y la valoración de los programas educativos, como de la práctica docente. (Fuertes, 2011).
También se habla sobre la situación y la simulación que sirven para que el alumnado adquiera recursos propios para salir de situaciones problemáticas. La simulación es virtual.
También se analiza en portafolios como herramienta para evaluar al alumnado. Según mi punto de vista, es en la que el profesorado puede ver más en profundidad lo que su alumno está aprendiendo y puede orientarle más sobre la marcha. Otro instrumento muy utilizado son las rúbricas. Se trata de un cuadro de doble entrada en el que las columnas se dedican a la escala de valoración, las filas a las competencias o partes de la misma (categorías) en la que la hayamos dividido para su evaluación. (José Monedero, 2011).